Johan Cruiff, expresó: “El futbol es un juego de errores”. Se trata de reducir al máximo posible los errores que se van a cometer a lo largo de un periodo o una temporada, hay factores impredecibles como lesiones, árbitros, calendarios, se trata de evitar que estos influyan en el resultado.
Una tarea fundamental es establecer que todos los miembros del equipo asuman como propios los objetivos previstos y realizar el trabajo para alcanzarlo.
En el futbol todo está sujeto a resultados, algo que ocurre en cada partido. Una primicia importante es cambiar para mejorar, los cambios se pueden realizar en segundos o en una eternidad, hay personas que deciden dejar de fumar en un día y otros toman meses y años, e igualmente pasa en las instituciones, mayor en el aspecto económico, si se detectan fallas el cambio es inmediato.
En el fútbol el producto es el fútbol, hay que mejorar es el equipo y todo gira alrededor de esta mejoría, se debe tener un equipo que esté en disposición de ganar todos los torneos para hacer felices a sus hinchas y socios, una manera de lograr nuestros objetivos es comprometernos con ellos ahora y siempre en beneficio del club, el éxito se obtiene gracias al esfuerzo de todos.
Para lograr los objetivos es importante el número de jugadores, el técnico argentino Gustavo Alfaro se refiere: “Lo ideal es 24-25 Jugadores, no más. ¿Por qué? Dentro de los 25 tengo 5 juveniles y trabajo con 20 profesionales, en el plantel están siempre los 11 que juegan; 5 están medianamente contentos que son los que están en el banco y ocasionalmente juegan, si se tienen mas jugadores, el descontento es mayor, siempre les digo que las camisetas no tienen nombre sino número, los puestos se los ganan en la cancha”.
Lo ideal es que el presidente se reúna con el técnico y jugadores, una vez al mes, evaluando fortalezas y debilidades, y corrigiendo al momento las posibles fallas. La comunicación es vital en cualquier acto de la vida y a nivel empresarial, el fútbol es una empresa y como tal es el manejo.